El alcalde con miembros de la comunidad gitana. / D. C. (Chiclana)
El acto institucional con motivo del Día de los Gitanos
Andaluces se celebró en el despacho de la Alcaldía con la presencia del
alcalde, José María Román, la delegada municipal de Minorías Étnicas, Pepa
Vela, así como de Antonio Román, María de los Reyes Román, Luis de los Reyes
Román y miembros de la comunidad gitana de Chiclana.
El alcalde ha recordado que se conmemora el Día de los
Gitanos Andaluces, tal y como se aprobó el 30 de octubre de 1996 en el
Parlamento de Andalucía”. “Esta declaración ha sido el acto institucional de
mayor calado que ha tenido el pueblo gitano en toda su historia, siendo un
reconocimiento tácito a los gitanos de Andalucía”, ha expresado José María
Román, quien ha añadido que “la importancia de los gitanos en nuestra región no
solo está ligada al flamenco, sino también a un conjunto de influencias en el
arte, tal y como trasladó a ese gaditanísimo Falla en su música, al
granadino Lorca en su poesía y teatro y a un malagueño Picasso en su obra
pictórica”.
Román ha expresado que “era obligado que hiciéramos este
acto, así como trabajar en este esfuerzo de integridad para evitar que puedan
existir algunos momentos de xenofobia y discriminación. Chiclana, durante toda
su vida, se ha significado porque la vida ha transcurrido con absoluta
normalidad y esa Chiclana es la que queremos seguir viviendo”, ha incidido.
Por su parte, Luis de los Reyes Román ha agradecido al
Ayuntamiento de Chiclana la conmemoración del Día de los Gitanos Andaluces y ha
dedicado este día al político y activista Juan de Dios Ramírez Heredia, “que se
ha dedicado su vida entera a defender la cultura gitana, que ha sido apropiada
por nuestro país, identificándose en todo el mundo”. En este sentido, Luis de
los Reyes Román ha leído la biografía de Juan de Dios Ramírez Heredia y ha
aclarado que “no solo puso su dedicación a defender al pueblo gitano, sino que
también puso su empeño en estudiar y trabajar, lo que demuestra que no son
tantos los obstáculos si de esfuerzas”.
Finalmente, Antonio Román ‘Tío Antonio’ ha agradecido la
organización de este acto institucional un año más y ha destacado que “el
Ayuntamiento de Chiclana, con la llegada del 22 de noviembre, se preocupa
porque este acto salga adelante”. “Gracias al alcalde y a la delegada de
Minorías Étnicas por su apoyo”, ha incidido. Asimismo, por la noche está
previsto celebrar un acto cultural y festivo en la Peña Flamenca Chiclanera,
sita en la calle Luna, en el que llevará a cabo un reconocimiento a María de
los Reyes Román ‘Tía María’.
Al finalizar el acto todos los asistentes quisieron hacerse una fotografía conjunta mostrando los diplomas del curso de manipulador de alimentos /UR
Instituto Romanò, organización perteneciente a la federación
Unión Romaní, celebró este jueves 21 de noviembre un acto de entrega de
certificados de manipulador de alimentos a 18 personas que realizaron un curso
a tal efecto los pasados días 17 y 18 de octubre, todos ellos familiares de
niños y niñas escolarizados en el CEIP Ibarburu de Dos Hermanas (Sevilla).
El teatro de este mismo centro educativo fue el escenario
del evento, que contó con la presencia del delegado de Educación, Deporte,
Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía en
Sevilla, Joaquín Pérez Blanes, quien presidió el acto e hizo entrega de los
diplomas a los protagonistas tras aceptar la invitación de la entidad
organizadora. También asistieron el secretario general de Instituto Romanò y
vicepresidente de Unión Romaní, Antonio Torres Fernández, y el director del
colegio Ibarburu, Raúl Gómez Ferrete, así como familiares, amigos, profesores y
alumnos del centro.
Tras dar la bienvenida y dirigir unas palabras a los
presentes, Gómez Ferrete dio paso a las intervenciones de Antonio Torres y
Joaquín Pérez, para a continuación proceder a la entrega de los certificados de
manipulador entre los aplausos de los asistentes.
A su término, el vicepresidente de Unión Romaní ofreció una
charla con motivo del Día de los Gitanos Andaluces, que se celebra cada 22 de
noviembre y conmemora la llegada de los primeros grupos de romané a Andalucía
de los que se tiene constancia documental. El 30 de octubre de 1996 el
Parlamento Andaluz aprobó una Declaración Institucional relativa a la fijación
de esta fecha como «Día de los Gitanos y Gitanas Andaluces».
La formación de manipulador de alimentos se encuadra dentro
del programa ‘Proceso de acercamiento de las familias gitanas a la escuela
‘gadyí’’, que lleva a cabo Instituto Romanò en la zona desfavorecida de Cerro
Blanco (Dos Hermanas) y que está subvencionado por la Consejería de Igualdad,
Políticas Sociales y Conciliación con cargo a la asignación tributaria del 0,7%
del impuesto sobre la renta de las personas físicas.
El objetivo que se persigue, además del formativo, es la
implicación de padres, madres, abuelos, tíos… en la educación de los menores y
su asistencia al centro escolar para tomar contacto con el día a día del mismo.
Con este fin se han planificado varios talleres para
atraerlos, entre los que se encuentra este curso, que abordó cuestiones
relacionadas con la limpieza e higiene, contaminación y conservación de la
comida, enfermedades de transmisión alimentaria y prevención de riesgos, entre
otras y que ha contado con una destacada presencia femenina (el 83,33% de los
participantes).
La obtención de este certificado faculta a su poseedor para
tratar con alimentos de forma segura. Se trata de un documento obligatorio si
se está en contacto con productos comestibles en cualquier momento de su ciclo,
desde la producción de materia prima hasta la llegada al consumidor. Casi
cualquier ocupación dentro de los sectores de la alimentación, la hostelería y
la venta y distribución precisa de esta formación.
La Delegación de la Junta de Andalucía y el colegio de
educación infantil y primaria Ibarburu se han comprometido a activar nuevos
talleres y cursos de esta tipología para familiares de alumnos del centro, que
desarrollará también Instituto Romanò, como entidad integrante de Unión Romaní.
La construcción de un muro que rodea un barrio social en el
que residen mayoritariamente personas gitanas en el municipio luso de Leiría
generó este miércoles una polémica en Portugal por las denuncias de los
vecinos, que acusan a las autoridades locales de aislarles con un pequeño ‘muro
de Berlín’.
El caso afecta al ‘Bairro Social de Integração’, en Leiria
(centro), donde viven 47 personas y donde acaba de concluirse un plan del
Ayuntamiento para realizar obras en las 18 casas que en él se encuentran y en los
alrededores.
Pero dichas obras, inicialmente muy celebradas por la
comunidad, incluyeron un muro de casi dos metros de altura que, denuncian los
vecinos, rodea su barrio y les ‘aísla’ del resto de la ciudad, lo que les ha
generado un profundo malestar.
‘Dicen que nos tenemos que integrar en la sociedad, pero
construyeron aquí un Muro de Berlín. A este lado están los gitanos, allí, las
viviendas. Es nuestro muro de la vergüenza’, ha dicho a Jornal de Notícias una
de las vecinas del barrio, Sandra Mafra, que resume la idea de segregación que
se ha instalado en la zona.
Ángel Parreño, Beatriz Carrillo, Pablo Fernández, Faustino Blanco, Yolanda Vidal y Trinidad Suárez, tras la firma. / JUAN LLACA
‘La esperanza de vida de la población gitana es entre 10 y
15 años menor que la del resto de la ciudadanía, lo que nos sitúa en
desigualdad’. El dato, facilitado por la vicepresidenta segunda del Consejo
Estatal del Pueblo Gitano, Beatriz Carrillo, pone de relieve ‘la necesidad de
trabajar de forma conjunta y coordinada para mejorar la salud y la calidad de
vida de una población que en España se estima que está entre las 750.000 y el
millón de personas’.
Beatriz Carrillo hizo estas declaraciones con motivo de la
firma de la ‘Declaración de Oviedo’, un documento que tiene como objetivo
promover la salud y el bienestar social en la población gitana. Enmarcada en el
Encuentro monográfico sobre salud y población gitana celebrado en el Palacio de
Congresos, la firma reunió a todas las partes implicadas, además de la
representante del Consejo Estatal del Pueblo Gitano.
De un lado, el Principado, representado por el consejero de
Salud, Pablo Fernández, y la directora general de Servicios Sociales, Trinidad
Suárez, y de otro, el Ministerio, con la presencia del secretario general de
Sanidad, Faustino Blanco y el director general de Servicios para las Familias y
la Infancia, Ángel Parreño. Asimismo, el Ayuntamiento de Oviedo, por medio de
su concejala de Salud Pública, Yolanda Vidal, también rubricó un documento que
supone ‘un nuevo enfoque’, un cambio en las dinámicas de intervención en las
que por primera vez se articula la coordinación entre diferentes
administraciones contando con la participación de la propia población.
‘Queremos que participen de forma activa, no solo con voz,
sino también en la toma de decisiones’, declaró Pablo Fernández, cuya
consejería lideró la elaboración de un documento ‘único’ en Europa.
Se trata de que ‘la población gitana participe tanto en los
procesos de prevención y sensibilización como en el diseño de estrategias’,
añadió por su parte la directora general de Servicios Sociales del Principado,
quien indicó que ‘se facilitarán los mecanismos de participación a través de
los colectivos de representación con el objetivo de recoger las necesidades en
primera persona’.
Por su parte, quien fuera consejero de Sanidad y actual
secretario general, Faustino Blanco, incidió en ‘la importancia de alcanzar
niveles de equidad en la salud, que es además una de las prioridades del
ministerio’.
Los objetivos
La ‘Declaración de Oviedo’ incluye un decálogo de recomendaciones
de organismos internacionales y compromisos basados en la evidencia científica.
Así, y según recoge el documento, los firmantes se comprometen a implementar y
colaborar con políticas, estrategias y programas de promoción de la salud y
bienestar en la población gitana que, entre otras, prioricen la modificación de
entornos sociales frente a la modificación de hábitos individuales y tengan en
cuenta los determinantes sociales, que asuman como objetivo asegurar una vida
digna a toda la población y la erradicación de las desigualdades sociales, que
incorporen la perspectiva de equidad o que mantengan una mirada local,
utilizando metodologías colaborativas que generen espacios multiculturales.
La consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, y el presidente de la Federación Regional Gitana de Asociaciones de Castilla-La Mancha, Jesús Cano Losada en la mesa inaugural de las jornadas / Ahoraclm
Toledo acoge durante el lunes 18 de noviembre unas Jornadas
sobre la Cultura y la Historia del Pueblo Gitano, un foro de encuentro cuyo
objetivo principal es dar a conocer a la sociedad la comunidad gitana para así
acabar con su estigmatización.
A lo largo de todo el día personas de gran formación y
especializadas están haciendo un repaso histórico, sobre de dónde vienen, lo
que les llevó a huir de su país de origen, la acogida y persecución que
sufrieron en España… y todo lo que tiene que ver con su historia. También se ha
hablado del papel fundamental de la mujer gitana y la importancia de la
formación y la educación.
Así, tras la inauguración a la que han asistido la consejera
de Educación de Castilla-La Mancha, Rosana Rodríguez, la consejera de Bienestar
Social, Aurelia Sánchez, y el presidente de la Federación Regional de
Asociaciones de CLM, Jesús Cano Losada, una mesa técnica ha abordado los fines
de la Federación Regional Gitana y la importancia del reconocimiento de la
historia y la cultura del pueblo gitano. A continuación, intervinieron el
periodista y profesor -presidente de la Unión Romaní- Juan de Dios Ramírez, que
habló de «La cultura gitana como la gran desconocida y la gran discriminada»; y
seguidamente la educadora social y presidenta provincial de la Federación de
Asociaciones Romaníes Andaluzas Mari Carmen Carrillo, que ofreció la ponencia
«La mujer gitana y su papel fundamental». Noelia González Lancha, trabajadora
social y especialista en igualdad de género de la Federación Regional Gitana de
Asociaciones de CLM, presentó la campaña de sensibilización por una sociedad
libre de estigmas hacia el pueblo gitano.
Mari Carmen Carrillo, en su participación en estas jornadas,
ha hecho un repaso del papel que ha tenido la mujer dentro del pueblo gitano,
haciendo hincapié en cómo ha sido fundamental para mantener su cultura al paso
del tiempo. También destacó cómo se creó en Andalucía la primera asociación de
mujeres gitanas de España y de Europa, así como la importancia que ha tenido su
acceso a la educación. «El trabajo incansable de aquellas mujeres ha permitido
que hoy haya una mujer gitana en el Senado y dos en el Gobierno de España».
Como pasos importantes dados en Castilla-La Mancha desde el
pueblo gitano señalan la creación del Programa Operativo Fondo Social Europeo
2014-2020 que estableció un marco de referencia para el impulso de las
políticas y medidas dirigidas a la inclusión social de la comunidad gitana en
la región a través de diferentes ejes de intervención. Del mismo modo, la
aprobación de la Estrategia Nacional para la Inclusión Social de la Población
Gitana 2012-2020 estableció un nuevo marco de referencia de medidas de
promoción para la inclusión.
La creación del “Programa Operativo Fondo Social Europeo
2014-2020 Castilla-La Mancha” estableció un marco de referencia para el impulso
de las políticas y medidas dirigidas a inclusión social de la comunidad gitana,
en Castilla-La Mancha, a través de diferentes ejes de intervención.
De igual modo, la aprobación de la Estrategia Nacional para
la Inclusión Social de la Población Gitana 2012-2020 en el año 2012, estableció
un nuevo marco de referencia de medidas de promoción para la inclusión. Desde
su aprobación se ha trabajado para mejorar el desarrollo de políticas más
inclusivas, es por tanto el objetivo y celebración de estas Jornadas.
La realización de estas Jornadas sobre la Cultura y la
Historia del Pueblo Gitano, se enmarca en la necesidad de acabar con la
estigmatización de este Pueblo, y no hay mejor manera que acercar y dar a
conocer a la sociedad mayoritaria, su historia y su cultura.
Se creará un espacio, donde personas con una gran formación
y especializadas, elaborarán un repaso histórico, sobre de dónde vienen, lo que
les llevó a huir de su País de origen, la acogida y persecución que sufrieron
en España… y todo lo que tiene que ver con su historia. Además, se hablará
sobre el papel fundamental de la mujer gitana, la importancia de la formación y
la educación, como una forma muy importante de INCLUSIÓN.
Es importante, dar a conocer un grupo cultural que
actualmente sigue siendo uno de los más discriminados y excluidos de Europa, y
la mejor forma es llevando esta cultura milenaria al mayor número de personas
que sea viable; profesores/as, universitarios/as, trabajadores/as sociales,
educadores/as sociales, animadores/as socioculturales, medios de
comunicación…el mayor número de gente posible para poder ir desmontando la estigmatización
de este pueblo, los prejuicios y estereotipos que les rodea, y que hace que la
inclusión siga siendo un objetivo inalcanzable hasta la fecha.
Los tres objetivos fundamentales, son: Dar a CONOCER la historia y la
cultura, REFLEXIONAR sobre
la realidad de las cosas desmontando estigmas, y PROMOCIONAR la Cultura de este pueblo, como es, y no
como la cuentan.
El cartel de las jornadas sobre la mujer gitana que organiza la Asociación Gitana de Gijón / Cedido
Las jornadas de mujer gitana que organiza la Asociación
Gitana de Gijón se celebraran el día 15 de noviembre. En este espacio, se
pretende exponer cómo el rol tradicional asignado a la mujer gitana atraviesa
una etapa de grandes cambios, y cómo los acontecimientos socio económicos han
influido en el papel ejercido por la mujer en ámbito doméstico a lo largo de
los años; transformando los modelos familiares y generando nuevos patrones más
igualitarios y autónomos respecto al hombre.
En estos tiempos se han ido produciendo más separaciones
dentro de la comunidad gitana, por lo que también queremos abordar este tema:
cómo afecta la ruptura familiar a todos sus miembros, como es el proceso de
separación, los apoyos y recursos existentes en caso de maltrato, y si todavía
se sigue utilizando la «ley gitana».
Y el día 18 de noviembre se realizará un taller para
descubrir las ventajas de aplicar la disciplina positiva en el ámbito familiar,
mejorando la convivencia entre los miembros y la educación de los hijos.
Manifestantes en la puerta del Centro Comercial Berceo denunciando el racismo que sufren las gitanas en los espacios públicos y comerciales. / Nuevecuatrouno
Una treintena personas se ha concentrado este frío y
lluvioso viernes tarde frente a las puertas del Centro Comercial Berceo para
mostrar su repulsa ante las presuntas conductas ‘antigitanas’ llevadas a cabo
por el personal de un establecimiento. ‘El pasado martes, dos mujeres gitanas
logroñesas, clientas habituales, fueron acosadas por las dependientas del
comercio’, denuncian.
En los carteles que portaban los manifestantes podían leerse
lemas como ‘¡Basta ya de racismo!’, ‘No al acoso antigitano’ y ‘Contra el
racismo, ni un paso atrás’.
Para finalizar la concentración, José Jiménez, coordinador
de E Zor Rroma, ha leído un manifiesto en el que ha proclamado que ‘la
ciudadanía gitana riojana está harta de sufrir el antigitanismo y que ya no
está dispuesta a seguir callada y que saldrá a exigir respeto cada vez que
sienta un trato inadecuado’. La lectura del manifiesto ha concluido con la
exigencia de una ciudad y una región libres de antigitanismo.
Manifiesto contra el antigitanismo
Queridos primos y primas. Gracias por venir hoy aquí a decir
basta ya de Antigitanismo.
El martes pasado un grupo de niñas gitanas sufrieron, una
vez más, el acoso racista por parte de las dependientas de las perfumerías
Primor. Esto no es un hecho aislado. Por desgracia, no hay ni un solo día en
que una familia gitana, una mujer gitana, un niño gitano, una niña gitana no
sea perseguido, perseguida, acosado, acosada, vejado o vejada por los
vigilantes o dependientes de cualquier comercio. Es algo que ya sabemos y que
lo hemos naturalizado de manera que incluso a nosotras nos parece normal. Y no,
no lo es. No queremos que lo sea. Y por eso protestamos, alzamos nuestra voz
contra el acoso racista antigitano para que no forme parte de nuestras vidas
cotidianas.
No es normal que nos criminalicen, no es normal que nos vean
siempre como criminales, como ladrones, cuando vamos a comprar lo que nos dé la
gana como hace el resto de la ciudadanía. Somos personas. Tenemos derechos. Es
muy triste tener que reivindicar nuestra condición de ciudadanas a estas
alturas del siglo XXI.
Queremos dejar bien claro que no vamos a continuar callando.
Que cada vez que nos persigan en cualquier comercio; cada vez que se nos trate
de manera inadecuada; cada vez que se nos falte al respeto; cada vez que haya
un incidente racista antigitano vamos a oponernos, vamos a plantarle cara a los
racistas, vamos a reaccionar, vamos a denunciar, vamos a hacer lo que siempre hemos
hecho para sobrevivir y es llamar a nuestros primos y primas y a todas las
personas payas o gitanas a que se solidaricen en nuestra lucha para hacer que
nuestra sociedad sea cada día mejor y menos racista.
Este sábado es el Día Internacional contra el Fascismo y el
Antisemitismo. Es importante recordarlo. El 9 de noviembre se conmemora la
noche de los cristales rotos, una de las masacres contra el pueblo judío que se
llevó a cabo en la Alemania Nazi. Recordamos este hecho para tener presente en
la memoria que los gitanos y las gitanas fuimos también víctimas del
holocausto, fuimos consideradas “la plaga gitana” por Hitler, un bengue, un
genocida, que -hay que recordarlo siempre- fue elegido democráticamente, por
votación en Alemania. El nazismo aprovechó los sentimientos antigitanos de las
masas para ganar elecciones y después provocar nuestra destrucción. Os
recordamos todo esto porque el domingo hay elecciones y os animamos a votar.
Votad a quien queráis, pero recordad que hay partidos racistas, xenófobos,
fascistas que si gobiernan querrán acabar también con nosotros y nosotras.
Sabedlo, y que lo sepan también los racistas: No nos vamos a
callar, vamos a seguir protestando, no queremos que esto ocurra en nuestras
ciudades.
Queremos, exigimos un Logroño, una Rioja, libre de
Antigitanismo.
Un amigo me acaba de enviar un WhatsApp con un párrafo perteneciente a un
artículo escrito por Heiko Maas que es el actual ministro de Asuntos
Exteriores de Alemania, en el que formula la siguiente pregunta: “¿Dónde
estaba usted cuando cayó el Muro de Berlín?” Y mi respuesta ha sido instantánea
y firme: “Ese día yo estaba allí”.
Hace un par de años yo reflexionaba sobre este acontecimiento por lo que
recupero una parte de la descripción que entonces hice y que considero más
relevante para sumarme a la celebración del 30 aniversario de la caída de
aquella infame barrera que durante tanto tiempo ―desde el 13 de agosto de 1961
hasta el 9 de noviembre de 1989― dividió a los ciudadanos berlineses,
habitantes de la histórica capital alemana a la sazón dividida, tras la derrota
del régimen racista y nazi culpable de la Segunda Guerra Mundial.
Muchos analistas políticos están de acuerdo en afirmar que la
construcción del Muro fue la culminación de la Guerra Fría que mantuvieron las potencias occidentales
capitaneadas por los Estados Unidos y las fuerzas dominantes en los países
comunistas a cuya cabeza estaba la Unión soviética. La Guerra Fría se libró durante muchos años
sin que, por suerte, nadie hiciera uso de la fuerza militar. Los gobernantes
comunistas decían que el Muro era una garantía para evitar que los fascistas
impidieran la creación de la nueva Alemania prosoviética. En realidad, el Muro
sirvió para impedir que los alemanes que vivían en el territorio de la
República Democrática Alemana (RDA) culminaran una emigración multitudinaria de
ciudadanos a la otra Alemania, la de la República Federal (RFA)
Una sencilla reflexión personal
A veces no puedo evitar pensar que en algunos aspectos de mi vida
política he sido un hombre afortunado. No sé si habrá sido por suerte o porque
yo estaba en la estación cuando pasó el tren
de mi destino y subí a él. La verdad es que cuando cayó el muro yo estaba en
Berlín y me pasé buena parte de la noche junto a los berlineses que
frenéticamente querían destruir aquella horrible barrera que causó tanta
tragedia y tantos muertos entre quienes intentaron atravesarla.
Recuerdo que el día 9
de noviembre fui a dar un paseo hasta la Puerta de Brandemburgo
acompañado de un amigo mío, Gyula Schmid,
gitano de origen húngaro, al que conocí el año anterior precisamente en la
parte oriental del muro. Este ciudadano tenía un salvoconducto que le permitía
pasar diariamente de una parte a otra del muro. Era un verdadero políglota.
Hablaba húngaro, alemán y un buen español. En realidad, él prestaba algún tipo
de servicio en la embajada española en la República Democrática Alemana. Yo
tenía un teléfono donde poder localizarle. Le llamé el día antes para decirle
que me encontraba en Berlín Oeste y quedamos en vernos al día siguiente.
Confieso que, a pesar
de que mi condición de diputado al Parlamento Europeo me ayudó a conocer las
condiciones de vida de los gitanos europeos, y especialmente de los gitanos
alemanes ―no se olvide que la sede del Parlamento en Estrasburgo está a un tiro
de piedra de la República Federal Alemana―. Por esa razón, un año antes,
aprovechando otro viaje a Berlín, me puse en contacto con la embajada española
en la RDA. A la sazón el embajador de
España en la República Democrática, desde 1985, era Alonso Álvarez de Toledo y Merry del Val. Recuerdo que recibí un
trato exquisito, de tal manera que un funcionario de la embajada me esperó en
la frontera, es decir en el muro, con los papeles necesarios para que las
autoridades del Este me dejaran pasar.
Ha pasado ya mucho
tiempo y por más que he buscado entre mis papeles no soy capaz de recordar el
nombre del funcionario que el embajador me asignó para que me acompañara en el
paseo investigador que yo pretendía dar por la parte comunista de la ciudad. Lo
cierto es que fue una persona amabilísima, conocedor de la escasa vida nocturna
de aquel Berlín triste de casas viejas de cuyas ventanas salía la luz tenue de
bombillas de bajo voltaje. Fue él quien me llevó a un bar de no más de 25
metros cuadrados, igualmente triste y en semipenumbra, donde acostumbraban a ir
algunos gitanos. Allí fue donde conocí a Gyula
Schmid. Él, junto al funcionario de la embajada, fueron para mí una fuente
de información valiosísima de primera mano que no puedo transcribir aquí por
razones obvias de espacio.
Un aire pesado presagiaba que algo extraordinario
iba a suceder
El día 9 de noviembre
de 1989 yo estaba en Berlín occidental porque ese día se celebraba una reunión
de la Comisión de Asuntos Jurídicos y de
Derechos de los Ciudadanos del Parlamento Europeo de la que yo formaba
parte con otros compañeros, diputados españoles como José Cabrera Bazán, Fernando Morán López, Josep Verde y Aldea, Juan
María Bandrés Molet y mi admirado amigo Carlos María Bru Purón. No debo dejar de reseñar que también
estaban con nosotros Maurice Duverger,
el gran jurista, politólogo y político francés, cuyos libros todos habíamos
estudiado en algún momento de nuestras vidas, así como un diputado alemán,
conservador al que tratábamos con una especial consideración ―y yo con
verdadera veneración― llamado Franz-Ludwig
von Stauffenberg. Apellido glorioso por ser el de su padre, Claus von Stauffenberg, coronel del
Estado Mayor de la Wehrmacht, que fue quien planificó el atentado contra Hitler
en 1944. El golpe fracasó y fue fusilado por el general Fromm que fue uno de los involucrados en el atentado. Stauffenberg
es considerado un héroe de la resistencia alemana.
Muy pronto supe por qué
aquel día estaba destinado a ser la llave de la historia inmediata de Europa. En
1989 cayeron todos los estados comunistas de la Europa del Este. En ese año,
como consecuencia de la “Revoluciones de 1989”, desapareció el Telón de Acero y cayó el Muro de Berlín. Y la Unión Soviética desapareció dos años
después.
Y me fui al hotel sin
imaginar lo que iba a suceder horas después
Aquella noche me fui a
la cama relativamente pronto. Estaba cansado. Pero no había logrado cerrar los
ojos cuando sonó el teléfono de mi habitación. Era mi amigo, el gitano
húngaro-alemán con quien había estado durante el día.
― ¡Baja, baja
rápidamente! Está sucediendo algo insólito. La gente del otro lado está
atravesando el muro y los soldados no les disparan. Es increíble. ¡Baja, baja!
¡Te espero en la puerta del hotel!
Tardé menos de cinco
minutos en vestirme. En los pasillos del hotel había un verdadero revuelo.
Todos nos precipitamos a la calle sabiendo que la providencia nos había
reservado el ser testigos de un acontecimiento único en la historia. Aquella
noche no me acosté. Quise vivir con intensidad el acontecimiento. La Puerta
de Brandemburgo me pareció la puerta del cielo porque podía atravesarla de
un lado a otro sin que nadie me parara.
Gracias a mi amigo
Gyula hablé con mucha gente y compartí con ellos su emoción y la cerveza a la
que me invitaban. Otras personas, a las que no había visto en mi vida y a las
que no entendía en absoluto, me abrazaban sin más. Unas reían, otras lloraban.
Mientras tanto algunos jóvenes atrevidos, con un martillo y un cincel empezaron
a sacarle trozos a aquel muro de la infamia que ocasionó la muerte de más de
125 personas.
Al final, cuando la
mañana empezaba a clarear, me fui al hotel dándole gracias a Dios por haberme
permitido ver con mis propios ojos lo que para tantas personas había sido tan
solo un sueño de libertad.
Y, como es natural, me
traje a Barcelona unos cuantos trozos del muro para mis amigos. Y en mi
despacho, mientras termino de escribir este comentario, estoy acariciando el
trozo que yo me quedé.
Programa de los dos días de actividades que se organizan en Oviedo / Cedido
La Dirección General de Servicios para las Familias y la
Infancia y la Dirección General de Salud Pública, Calidad e Innovación, del
Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, junto con la Consejería de
Salud del Gobierno del Principado de Asturias y el Consejo Estatal del Pueblo
Gitano organizan el encuentro monográfico sobre salud y población gitana titulado
“Los Determinantes Sociales en el Diagnóstico y la Participación Comunitaria en
la Solución”.
Este encuentro se celebrará en Oviedo los días 18 y 19 de
noviembre, en el Palacio de Exposiciones y Congresos Ciudad de Oviedo, y tiene
los siguientes objetivos:
Realizar una aproximación a los determinantes sociales como diagnóstico y la participación comunitaria como intervención.
Intercambiar experiencias y extraer lecciones sobre cómo mejorar la salud psíquica, biológica y social de la población gitana mediante procesos de participación comunitaria.
Siendo la salud una de las brechas de desigualdad
identificadas en las diferentes encuestas de salud de población gitana y uno de
los ejes principales de la Estrategia Nacional para la Inclusión Social de la
Población Gitana en España 2012-2020, consideramos prioritario impulsar las
intervenciones de promoción de la salud como parte del desarrollo integral de
las personas. Tal y como dice el lema del encuentro es crucial atender a “Los Determinantes
Sociales en el Diagnóstico y la Participación Comunitaria en la Solución”.
Esto implica una colaboración activa entre diferentes
agentes, administraciones y la propia población gitana así como una perspectiva
de intervención común de todas ellas que pretendemos unificar con encuentros
como este y en la Declaración de Oviedo.
Para cualquier información adicional, os podéis poner en
contacto con los organizadores en el correo electrónico consejogitano@mscbs.es.
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